Un Pato a la altura de los Nobel.
Una vez recogido el Premio Nobel de Literatura de manos del Rey Carlos Gustavo de Suecia, Mario Vargas Llosa se trasladó a la Sala Azul del Ayuntamiento de Estocolmo, donde se celebró la cena de gala, presidida por el rey y por el presidente de la Fundación Nobel. Junto a él, y encabezados por la realeza sueca, ocuparon las mesas los premios de Química, Física y Economía, así como el resto de los invitados, más de un millar de personas, entre las que estaban políticos, estudiantes, representantes de la industria y la cultura sueca y las delegaciones de los países participantes.Todos ellos pudieron degustar como primer plato del menú de la cena la ‘Galantina de pato con manzana, calabaza, verduras en escabeche y mermelada picante’, elaborada con foie grass, magrets y muslos de pato de Villamartín de Campos, que elabora la empresa palentina Selectos de Castilla. El distribuidor de esta firma en Suecia sirvió los productos que constituyeron los ingredientes para la cena, celebrada el pasado 10 de diciembre, una fiesta exclusiva, que se celebra cada año tras la entrega de los galardones. El Rey Carlos Gustavo, acompañado de la Reina Silvia, encabezaba la comitiva que, seguida de los galardonados, descendió por la escalinata que conduce a la Sala Azul del Ayuntamiento, donde esperaban los invitados. Tras el brindis en honor del Rey de Suecia y de Alfred Nobel, comenzó la cena, cuyo menú se guardaba en secreto hasta ese momento. En un ritual ya conocido, los camareros, perfectamente uniformados, descendieron por las escaleras para servir los platos en las 66 mesas dispuestas para la cena, en la que ocupó el primer lugar el pato de Villamartín. Después llegaría el plato principal, a base de pescado, y los postres dulces. Selectos de Castilla, que cría los patos y elabora los derivados desde el año 1989, se sitúa así en uno de los acontecimientos de mayor prestigio en el ámbito internacional. En sus instalaciones de Villamartín se crían las aves en semilibertad y se elaboran los productos como el hígado graso, el fresco, patés, el pato en confit y embutido de pato, así como cochinillo o codornices en confit y diversos preparados de trucha de la Montaña Palentina.