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Selectos de Castilla, con los pies en la tierra en la cría respetuosa del pato.

Ante todo Selectos de Castilla ha construido su fama en las mesas de medio mundo desde una empresa familiar, que ha optado por un crecimiento más lento que otras firmas, perosin renunciar a la calidad del producto que es su emblema: el hígado de pato, bien en fresco, transformado en Micuit o mezclado con otras materias primas, como es el caso del cordero lechal churro.Su actividad principal es la cría del patitode un día hasta la elaboración de susderivados, pero Enrique de Prado Gairaud,desde que con sus hermanos Javier y Manuel tuvieron la idea de aprovechar estos conocimientos traídos de Francia para asentarse y aplicarlos en la tierra de su padre, apuesta “por la granja al aire libre junto con un proceso que nos evita tener que introducir elementos químicos”, explica Enrique. Un valor añadido que diferencia a la empresa de la competencia, que se nota en la etiqueta y ante todo, en el paladar.Es posible que sea porque se beneficia del entorno natural, cercano a la lagunade La Nava, un humedal que acoge cada año a miles de aves migratorias, cuyo clima es muy favorable para la cría del pato. La técnica del engorde y la transformación del pato de forma artesanal no le van a la zaga. Así es la concienciación de los promotores de Selectos de Castilla en materia de bienestar animal, adelantados a su tiempo. Han optado por el sistema de embuche tradicionalcon maíz grano exclusivamente y la utilizaciónde jaulas colectivas construidas en 2001 y únicas en España. Las inversiones en instalaciones de embuche siguen creciendo en capacidad con una nueva sala de 880 patos de capacidad quincenal….Sigue en documento adjunto…

Resumen

Enrique de Prado recogía el 10 de junio pasado el premio Cecale de Oro concedido por la Confederación de Organizaciones Empresariales de Castilla y León. En un primer momento ha sido la sorpresa. Luego, la satisfacción al ser reconocida la tenacidad de su equipo humano de esta empresa palentina por ejercer desde hace veinte años no sólo una actividad ganadera, sino también por defender una cría, la del pato, desde el concepto de artesanal, como una explotación estrella en bienestar animal, y de desarrollo rural, como el empleo que proporciona su fábrica de productos del pato, el lechazo, el cochinillo y la trucha en Villamartín de Campos.

Fuente

Cesar Marcos – Revista Ganadería nº 61 – Junio-Junio 2009

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